Tras el primer caso detectato de doping tecnológico en el ciclismo (Mundiales de ciclocross sub.23), el presidente de la Unión Ciclista Internacional, Brian Cookson, afirmó que la UCI esta decidida a combatir el doping tecnológico y a tomar todas las medidas necesarias para hacerle frente a su amenaza.
«Habíamos advertido que el doping tecnológico era una amenaza para el ciclismo. Ahora ya tenemos el primer caso. Nos tomamos esto muy en serio. Estamos investigando nuevas tecnologías que son mínimamente invasivas para que no haya que desmontar las ruedas. Pero si fuera necesario, desmontaremos todas las ruedas de cada ciclista», dijo Cookson a DPA durante el Tour de Qatar.
El presidente de la UCI confirmó que el caso de la deportista de ciclocross Femke Van Den Driessche era el primero en el que se había detectado el doping tecnológico en un campeonato de ciclismo.
La corredora fue descubierta y declarada culpablepor la utilización de un motor de ayuda instalado en la bicicleta durante una carrera femenina sub-23 de los Mundiales de ciclocross en Heusden-Zolder (Bélgica).
La UCI tiene incluido en el catálogo de infracciones el «fraude tecnológico» desde principios del año pasado. Los conductores acusados de esta práctica serán sancionados con una descalificación inmediata, una sanción temporal de mínimo seis meses y multas económicas.