El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, invitó a los atletas refugiados que lograron su clasificación, a competir en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, Brasil, en 2016.
En una sesión de la Asamblea General de la ONU sobre el deporte y su papel en la promoción de la paz, el directivo alemán se refirió a los practicantes de diversas disciplinas afectados por la actual crisis migratoria en Europa.
“Los clasificados serán bienvenidos en la Villa Olímpica, junto al resto de los 11.000 atletas de 206 comités olímpicos nacionales”, afirmó Bach en el foro, que aprobó una resolución que llama a respetar una tregua en los conflictos de cara a la XXXI cita estival.
De acuerdo con Bach, el COI brindará su bandera e himno a quienes por la crisis quedaron sin un equipo nacional para que representar o un pabellón bajo el cual competir. Se trata de un símbolo de esperanza para los refugiados, y una llamada al mundo a resolver este problema, subrayó.
El presidente del COI agradeció el apoyo de la ONU, en el impulso del deporte como una herramienta para la convivencia pacífica y destacó el respaldo de la comunidad internacional a la iniciativa aprobada.